Si te cuesta presentar a tu perro con otros perros o te preocupa empezar con buen pie una nueva convivencia entre peludos, aquí te viene una pequeña ayuda. A menudo, el lenguaje gestual es un buen indicativo de cómo va a desarrollarse una primera interacción. No obstante, presentar a dos perros desconocidos es más fácil cuando sabes cómo resolver tensiones en un espacio compartido.
Antes de presentar a tu perro con otros, es ideal que (tú) conozcas las señales de calma y advertencia más comunes. Estas señales, pueden ser más o menos sutiles, pero revelan mucho sobre el estado emocional y la disposición de los perros. De igual modo, un perro que ha tenido un desarrollo correcto, y ha vivido un buen periodo de socialización temprana se comunicará correctamente.
Sin embargo, es común que muchas personas malinterpreten señales por desconocimiento,
Por eso, comprender las motivaciones es fundamental para evitar malentendidos y promover un ambiente seguro y cómodo.
Dicho esto, hay dos grandes males en las presentaciones: las prisas y la falta de control (donde vamos a incluir tensión de correa y manejo deficiente). La mayoría de los perros, resuelven incluso los problemas extra que muchos guías o tutores generan, agregando más tensión y dificultad a la situación. Como los acercamientos frontales, agregar tensión en la interacción, tirones o nervios y gritos. Por lo tanto, es básico que te asegures de empezar con presentaciones en paralelo (1), progresivas (2) y breves (3) al inicio.
El paseo en paralelo es una estrategia muy útil que permite que los perros se acostumbren a la presencia del otro sin acercamientos directos. Esta técnica, que yo recuerdo verla mogollón en El encantador de perros (y es lo único que me creía* de la teoría que se veía en el programa casi, por cierto), permite que los perros se centren en captar información y en el entorno, evitando focalizar en el otro perro y generar situaciones de tensión inicial.
Para ello, los dos perros que estas presentando caminarán a una distancia prudente (esta puede ser 3 metros, o 10 metros: fíjate en tu perro y en su estado emocional, porque poco tiene que ver la actitud de un podenco, un pastor alemán y un boyero de Berna) y, poco a poco, se puede reducir el espacio entre ellos si se observa que ambos están relajados. Para perros con problemas de comportamiento, agregar otras actividades en paralelo (como un sembrado, o searching), siempre que no haya problemas de protección de recursos, puede ayudar a crear un vínculo compartido sin presionar a los perros a interactuar directamente.
* Considero que César Millán sabe mucho de gestionar perros (aquí puedes leer un artículo completo, donde trato el tema a fondo), pero lo hace, casi siempre, con una visión resultadista, ajena al bienestar de los animales a corto y medio plazo; y, a menudo, también a largo plazo, si estos acaban en indefensión aprendida.
Además, es importante que los acercamientos no sean frontales. La proximidad y un acercamiento en línea recta puede aumentar la tensión entre los perros: sobre todo, si tienen mucha energía o dificultades para entender el lenguaje de otros canes.
Por el contrario, movernos de forma lateral, reducir la distancia a través de movimientos lateralizados o ladeados e ir presentando de forma gradual, es una opción mejor. Un perro puede olfatear a otro perro de lejos, no hace falta ponerle la cara en el culo, en serio. Asimismo, las interacciones breves (unos segundos, y separamos al inicio) permiten —sobre todo a los perros más inseguros, o aquellos perros con otros perros de alta energía delante— conocerse sin sentirse desafiados, lo que contribuye a un ambiente de calma.
En la mayoría de los casos, es preferible darle tiempo a cada perro para procesar la presencia del otro de forma gradual y relajada. Incluso cuando nos parezca que, a veces, nuestro perro llega con mucha energía y, luego, reduce, cuando ya ha saludado, existe una gestión problemática que puede generar situaciones de tensión.
Un problema que se da 80 de cada 100 veces entre tutores son las correas en «X» o entrecruzadas. En mi caso, lo he explicado millones de veces y he pegado millones de broncas también. Es vital tener cuidado con esto para evitar situaciones incómodas: para ello, imagina que las correas son las manecillas de un reloj y muévete en sentido horario o antihorario (y coge distancia hacia atrás, si el otro tutor no ayuda) según sea necesario para evitar que estas se líen. ¿Cómo? Acompañando a tu perro en el movimiento y durante la presentación: ¡todo lo contrario a mantener una actitud estática!
A menudo, cuando las correas se cruzan entre sí, ambos perros pueden sentir que pierden autonomía y libertad de movimientos, generando mayor tensión. En este sentido, acompañar con movimientos sin tensión en la correa (y si el perro estira mucho, te vas a los puntos anteriores: paseos en paralelo y acercamientos indirectos) es básico. ¿Por qué? A grandes rasgos, te permite transmitir calma y una guía correcta a tu perro, en vez de nervios. Puedes leer sobre contagio emocional, si quiere saber más.
Los arneses en forma de H o Y ofrecen una mejor distribución de la fuerza y un control más adecuado que los collares tradicionales. Como ideal, deberían adaptarse a la anatomía de tu perro y no limitar sus movimientos. En cualquier otro caso, el arnés no es el adecuado.
El arnés permite redirigir suavemente (por lo menos, con eficiencia) al perro ante una situación de tensión. Por ejemplo, al presentar a dos perros desconocidos, uno de ellos empieza a invadir el espacio (o a intentar subir una pata en tu perro, que es bastante celoso de su espacio personal), lo apartamos sutilmente y evitamos que la situación escale. Después, volvemos a intentar la presentación.
Presentar a dos perros desconocidos puede parecer un reto, pero no es más que un comportamiento natural. La mayoría de perros, en libertad, sabrán comunicarse, establecer límites y salir de una situación. Sin embargo, el entorno, el uso de correas y otras herramientas necesarias en sociedad pueden complicarlo.
Para el caso más complejo que se me ocurre, cuando se acerca un perro desconocido sin supervisión, grabé un vídeo para el canal de YouTube que puede ser de ayuda.
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